domingos en tránsito

para este punto de nuestras vidas podemos acordar que la experiencia humana es un proceso

y como todo proceso: no es lineal

y como todo proceso: termina -pero de esto no quiero escribir (hoy)-

se hizo más ligera la vida en el momento que concluí que esta se transita, el objetivo no es llegar al final; es que cada (sub)proceso de vida se haga más llevadero. Se transita el duelo, la adultez, la depresión, la ansiedad, los sueños, el domingo.

todo es un tránsito en el que a veces hay tráfico, semáforos, accidentes, diferentes climas y temperaturas y, sobretodo, distintas compañías. Sostengo que es más agradable en compañía de otro tránsito, en paralelo. capaz y hace que todos los factores mencionados fluyan.

lo difícil -o fastidioso- del tránsito es cuando se obstaculiza; y más cuando el motivo es el vehículo de una.

y el mío ahora es un desastre.

tengo que admitir que a veces lo prefiero así

que se note mi sufrimiento, que se ponga en evidencia el caos

TAL VEZ y es un grito de ayuda

me di cuenta, también -después de escribir el párrafo anterior-, que el común denominador de mis problemas soy yo -lol-

¿esto es igual a "soy yo el problema"?

y sí

cuesta acordarse que lo único que está en mi poder es decidir cómo reacciono ante las cosas que pasan a mi alrededor. Siendo honesta y vulnerable les cuento: no sé cómo hacerlo.

estas dos últimas semanas -o décadas- las llamo "enfrentarme a mi misma". ante vínculos, la adultez, la ansiedad, los duelos y la últimamente latente crisis de identidad.

me han ganado las ganas de permanecer en cama. ante todo lo sucedido no estoy conforme con cómo estoy reaccionando -o la falta de reacción-

no estoy dejándome transitar ni salir del redondel.

volvimos a los domingos, el martes daré razón. gracias por leerme, gracias por existir, gracias por hoy,

besito de domingo,

Cath